El chichero del pueblo

IMG_0004

 

Amadeo Pérez

el chichero del pueblo

Por: Juan Alberto Sánchez García

 

En el mercado municipal de La Grita, a su entrada principal ha estado vendiendo chicha consuetudinariamente  por  muchos años  el señor Amadeo Pérez; deliciosa y tradicional bebida originaria de nuestros aborígenes obtenida de maíz.
Lleva 34 años en este oficio como un verdadero EMPRENDEDOR a modo propio, lo que le ha servido para levantar su familia;  hijos que hoy lo ayudan y comparten la tarea  cuando me he sentido enfermo o cansado, como recientemente que le dejó “su negocio” a uno de los muchachos, quien cuidó con atención y esmero el negocio de su padre.
El maíz para la preparación de la chicha lo compra aquí mismo en el mercado de La Grita, pero también se lo traen de Pregonero, específicamente de la aldea “Las Aguadas” donde cultivan esta variedad de maíz amarillo llamado “Chiquito” y que los antepasados lo llamaban maíz buñuelo; maíz caracterizado por producirse en zonas relativamente frías y que sirve también para hacer esa exquisita arepa finita y tostada en los fogones de leña, ese es el pan del campesino tachirense, con aguamiel y cuajada.
Comenta el señor Amadeo que la situación está muy difícil, que no se salva ni él como chichero, se le dificulta encontrar la materia prima sobre todo el maíz, azúcar y los vasos plásticosy ahora pa  ñapa no hay efectivo; todo se le ha encarecido y tiene muchos inconvenientes para encontrarlos, por eso ya un vaso de chicha lo tiene que vender en mil bolos.

IMG_0020 (2)No se amilana como bien lo recalca por “la grave situación que estamos pasando” así la ve este humilde chichero, y con fortaleza asegura que aquí seguirá hasta que el cuerpo aguante y las condiciones económicas lo permitan, enfatiza que no va a desmayar con sus 34 años de trabajo para seguir todos los días vendiendo esta delicia y tradición añeja de los pueblo andinos, como lo es La Chicha de maíz y la de viento.
Sigo en esto de preparar y vender chicha porque fue el oficio que aprendí, no comprendo llegar al mercado del pueblo y que no vendan chicha, la que aprendí a tomar de niño cuando venía con mis padres los domingos a la misa y como premio me compraban un vaso de chicha y un pastel.

Orgullosos debemos sentirnos los hijos de esta comarca “La Grita” por tener estos verdaderos ciudadanos que han hecho del trabajo honesto, su modo de vida; que nos identifica junto a los pasteles, las quesadillas y las almojábanas; estos sí son los verdaderos “Héroes Anónimos” que enaltecen la cultura popular de los pueblos, y que poco o nada los miran las autoridades y gobiernos municipales de siempre; aquí jamás hemos visto y posiblemente no veamos a un humilde y honesto trabajador de este tipo, recibiendo la “La Orden de La Ciudad” como honra y estímulo a su emprendimiento.

©JASGoctubre 2017

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s