¡Qué tiempos aquellos……..!
Pintas y Repintas
Por: Juan Alberto Sánchez García
Nuestros pueblos andinos, los que han vivido y deben su existencia al trabajo agrícola, siempre los han acompañado los conocimientos ancestrales, unidos a los saberes populares. Fue común para muchas generaciones, escuchar y participar el primero de enero, luego del jolgorio vivido con la despedida del año viejo y la llegada del nuevo año, de tener que levantarse temprano y comenzar una minuciosa jornada de observación del clima durante todo el día.
Por eso desde temprano el campesino se apostaba en el corredor de la casa frente al barbecho a observar durante el dia, cómo se presentaba el clima, a esa práctica ancestral de minuciosa observación, muchas generaciones de campesinos apegados al trabajo del campo, lograban predecir cómo sería el comportamiento del clima y por ende le avisaba como debía organizar la época de preparación de sus barbechos y la siembra, que luego se convertiría en prospera cosecha para su sustento familiar.
Pero, ¿en qué consistía esta práctica ancestral de las “Pintas”? era la observación diaria que se hacía desde el primero hasta el 12 de enero, del comportamiento diario del clima, lo cual indicaba que tal como se presentará el día primero de enero así sería el clima que habría durante todo el mes; el día dos de enero, predecía el clima del mes de febrero y así sucesivamente hasta el 12 de enero, que le indicaba el clima que tendría el mes de diciembre.
No conforme con esta información producto de la observación diaria, venia las llamadas “Repintas” cuyo mecanismo de observación consistía en que el día 13 de enero, el clima de la mañana indicaba el mes de enero y el clima por la tarde del mismo 13 de enero predecía el mes de febrero hasta llegar al dia 18 de enero prediciendo el clima de noviembre y diciembre para completar el año.
Las generaciones que hoy están por los 50´s hasta los 90´s años, recuerdan estas prácticas climatológicas, que sin tener algún basamento científico se aproximaban a la realidad con mucha certeza, así los practicaron y trasmitieron las culturas Inca y Maya, y así fue transmitida de generación en generación.
Las Pintas y Repintas, fueron prácticas culturales determinantes en la agricultura de esas épocas, pues no existían los sistemas de riego ni los avances tecnológicos que luego fueron apareciendo, como es el caso de los satélites, que en tiempo real informan de la situación climatológica y que han cambiado determinantemente el quehacer agrícola.
Además, hoy es prácticamente imposible pensar en predecir el clima con las “Pintas y Repintas” por los grandes trastornos y alteraciones que el clima como parte del medio ambiente vienen sufriendo, por los malos manejos que el hombre ha hecho del ecosistema, tales como hoy se conocen los fenómenos del cambio climático y el efecto invernadero que están alterando radicalmente el ambiente climatológico del mundo.
Recordamos este acontecer y lo dejamos aquí para que la nuevas generaciones lo conozcan y lo mantengan como parte de los saberes populares del pueblo.
JASGenero2020